Ciudad de San Salvador.
Es la capital de la República de El Salvador y la cabecera del departamento y municipio homónimos.
Como capital de la nación, alberga las sedes del Gobierno y el Consejo de Ministros de El Salvador, Asamblea Legislativa, Corte Suprema de Justicia y demás instituciones y organismos del Estado, así como la residencia oficial del Presidente de la República. Es la mayor ciudad del país desde el punto de vista económico y demográfico, y asiento de las principales industrias y empresas de servicios de El Salvador.
Con una población de 316.090 habitantes, 6 esta ciudad es la principal urbe del Área Metropolitana de San Salvador, por ello, esta aglomeración urbana es la segunda más grande de Centroamérica y la sexta en toda la región de América Central y el Caribe.
No tenemos poblaciones indígenas – San Salvador
La insistencia en tener la población más mestiza de América Latina, que ya no tenemos poblaciones indígenas, que a diferencia de nuestros vecinos no tenemos herencia africana. Ninguna de estas afirmaciones se sostiene ante la evidencia histórica disponible para demostrar que los salvadoreños sí reconocían su herencia africana.
Tras la independencia, criollos y mestizos se dividieron en dos grupos, liberales y conservadores, apartando a los indígenas de cualquier discusión sobre el poder.
El 22 de noviembre de 1.824, se promulgó la Constitución de la República Federal de Centroamérica. El líder de la unidad centroamericana fue, sin embargo, el hondureño Francisco Morazán, quien fuera elegido dos veces presidente de la Federación, en 1.830 y 1.835. Él realizó la primera reforma liberal en toda Centroamérica: otorgó la libertad de culto, promulga la ley de divorcio, convirtió los conventos en prisiones modelo y cuarteles, fomentó y democratizó la enseñanza y abolió los diezmos y primicias con que la Iglesia gravaba al pueblo.
La Constitución, por otra parte elaborada por grupos absolutamente minoritarios, garantizaba un reparto de poder entre los caciques territoriales con el decidido propósito de asegurarse la capacidad de maniobra necesaria para controlar a su antojo los respectivos territorios según sus propios intereses.
Estos intereses privados carecían, sin embargo, de la profundidad o de la importancia nacional imprescindible para perdurar mucho tiempo.
La invisible herencia africana de El Salvador
En su investigación sobre la relación entre raza, nación y poder en El Salvador (Seeing Indians, 2005) la politóloga Virginia Tilley señala que a pesar de la presencia histórica de afrodescendientes en El Salvador por rechazo y amnesia social, al contrario de lo indígena, la negritud no forma parte de los discursos identitarios del mestizaje en El Salvador.
Sin embargo si bien es cierto que la negritud como definición de la identidad cultural, étnica o nacional en El Salvador no es muy “visible”, no podemos constatar un olvido y rechazo del todo a lo largo de la historia. En mis investigaciones, indago formas de representación y autorepresentación de “ser negro” producidas por políticos, médicos, antropólogos, viajeros y escritores. Un punto de partida de la investigación son las consideraciones del antropólogo Peter Wade según el cual conceptos de mestizaje tanto de corte oficial y colonial como subalterno crean espacios de lo “indígena” y lo “negro”. No obstante por un lado la representación y visibilidad de un “otro” que es diferente racial y culturalmente, se manifiesta como violencia simbólica que busca establecer y legitimar asimetrías y formas de poder.
Comida Típica
Las Pupusas de Maíz o Arroz, con salsa de tomate y ají, y ensalada curti.
Una pupusa que significa grande, relleno, abultado. Es una tortilla de maíz gruesa hecha a mano (a base de masa de maíz, una masa de harina de maíz o de arroz, usada en la cocina americana) que está rellena con uno o más de los siguientes ingredientes: queso (normalmente un queso fresco muy común en ciertos países americanos llamado quesillo), chicharrón, achote, frijoles refritos o queso con loroco. También está la pupusa revuelta con ingredientes mezclados, como queso, frijoles, chicharrón o tocineta.
Las pupusas son la comida típica más difundida en El Salvador, probablemente por la tradición instituida de generación en generación. Pese a que no se conoce de manera certera su origen, estudios antropológicos señalan que nació en territorios centroamericanos, especialmente en el occidente de El Salvador.
La preparación de dicho alimento conlleva diversos pasos y el uso de ingredientes variados, los cuales también constituyen un aporte económico para los productores. Existen controversias que han tomado carácter internacional acerca del origen y derechos sobre las mismas; sin embargo, dichas controversias no han supuesto consecuencias.